INNOVA Research Journal 2018, Vol 3, No. 2.1, pp. 67-76
El principal problema es la resistencia del estudiante a ser activo en su aprendizaje,
motivado por los modelos tradicionales de enseñanza y sobre todo porque no aprecia la utilidad
de este aprendizaje para el rendimiento en los exámenes: pues normalmente éstos premian el
aprendizaje mecánico o memorístico. Según Chadwick (1996), las estrategias cognitivas son
procesos de dominio general para el control del funcionamiento de las actividades mentales,
incluyendo las técnicas, destrezas y habilidades que la persona usa consciente o
inconscientemente para manejar, controlar, mejorar y dirigir sus esfuerzos en los aspectos
cognitivos, como procesamiento, atención y ejecución, en el aprendizaje. Son críticos en
adquisición y utilización de información específica e interactúan estrechamente con el contenido
del aprendizaje. Las estrategias cognitivas son destrezas de manejo de sí mismo que el alumno (o
persona) adquiere, presumiblemente durante un periodo de varios años, para gobernar su propio
proceso de atender, aprender, pensar y resolver problemas. De manera general, se entienden las
estrategias cognitivas como todas aquellas conductas y procedimientos secuenciales, planeados y
orientados por reglas, que le facilitan a una persona aprender, pensar y ser creativo, con el fin de
tomar decisiones y resolver problemas. Las estrategias cognitivas se dividen en estrategias de
aprendizaje, cuando son utilizadas por el estudiante, y estrategias de enseñanza cuando son
utilizadas por el docente.
Tradicionalmente, los roles y la relación entre el profesor y el alumno estaban claramente
definidos. Los profesores tenían un papel activo como transmisores de la información y los
alumnos tenían un papel pasivo como receptores de ella. Actualmente, las situaciones
interactivas que se llevan a cabo en el aula se construyen a medida que los alumnos y los
profesores participan e interactúan conjuntamente en contextos comunicativos. El profesor
interactúa en todo momento con el alumno para transmitirles conocimientos, facilitarles las
explicaciones a través de estrategias y recursos diferentes, producir y explicarles la información,
darles instrucciones para la elaboración de actividades, recursos todos ellos que buscan ayudar al
estudiante a desarrollar sus competencias lingüísticas comunicativas. En su respuesta el alumno
también adquiere un papel activo dentro del proceso de enseñanza- aprendizaje. Entre ambos
interlocutores se produce una negociación del significado, al tiempo que una interacción real
dentro del acto comunicativo en la producción y ejecución de actividades, cuando preguntan
dudas acerca de la información proporcionada, en la participación dentro del aula, en el
intercambio de conocimientos, etc.
Para que se produzca una interacción real entre el profesor y el alumno, es importante que
los alumnos adquieran un rol activo dentro del proceso de aprendizaje, y que tengan una
motivación por el aprendizaje de una lengua extranjera.
Metodología
La presente investigación es de carácter descriptivo y de naturaleza educativa y
pedagógica, por lo que se basa en el criterio de los miembros de la comunidad educativa, que
incluye a 180 alumnos del primer nivel del Centro de Idiomas de la Universidad Central del
Ecuador, que es fundamental y dará veracidad a este proyecto.
En la información a continuación se encuentran algunos datos de las personas
encuestadas:
Revista de la Universidad Internacional del Ecuador. URL: https://www.uide.edu.ec/
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